Salgo del túnel, ¡que luz! Y allá, a lo lejos, el mar con sus barcos relucientes. Giro a la derecha y subo por la calle del Sol. Cierro los ojos e imagino años atrás con sus ventanas repletas de geranios. Todo lleno de color y aroma de primavera. Los vecinos asomados a la calle conversan en viva voz:¡Que bonita mañana!. No tienen prisa.
¡Sal al portal! Dice Carlos a Susana y allí comienzan a hablar. Se conocen desde niños y viven una amistad que madura con el tiempo. Aunque pasan de los ochenta, su voz es firme y segura. Ella recuerda los paseos por la playa con su bañador-vestido que cubría todo el cuerpo. Él , con el suyo a rayas, adentrándose en el mar sin miedo a las frías aguas siempre vivas. Su braceo es incesante y aparece en el Puntal, orgulloso de sí. Es hora de regresar.
(Inspirado en la foto ”La hora del paseo”)
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